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Huilo Huilo es hotspot en biodiversidad y depende de todos los cuidados que le demos en nuestras visitas para que siga siendo de esta manera: Es nuestro deber cuidar el bosque. Respetar el ritmo natural de sus ecosistemas, permitirá que futuras generaciones disfruten las maravillas de este patrimonio de la humanidad.
No olvides los cuidados que debes dar al bosque en cada una de tus visitas. El respeto, es fundamental para mantener a la reserva en buen estado.
Demos una oportunidad a las plantas; recorre la Reserva sin cortarlas, pisarlas o dañarlas.
Cada especie es fundamental para el ecosistema y algunas están en riesgo de extinción. Está prohibido cazar o pescar. Sólo se permite realizar pesca con devolución y en lugares autorizados.
Los incendios son el peor desastre para todas las especies. No está permitido prender fuego o hacer fogatas, con excepción de lugares implementados e identificados para este fin.
Los cursos de agua que se encuentran en la Reserva son de los más puros del Planeta, por lo que está prohibido verter aguas servidas o desechos en ellos.
Al iniciar una excursión recuerda llevar provisiones que generen pocos desperdicios y, al volver, clasifícalos y deposítalos en los contenedores de residuos que correspondan.
Si es necesario, recuerda el método de la Güiña: Cava un agujero lejos de cursos de agua, haz en él tus necesidades y luego tápalo sin dejar huellas visibles de desechos humanos.
Se prohíbe la introducción de animales domésticos a la Reserva, los cuales ya sea por ataque directo o transmisión de enfermedades, son una amenaza para la Fauna y Flora Nativa.
Por seguridad de los visitantes y conservación del entorno natural, no está permitido acampar ni consumir comidas dentro de la Reserva, salvo en lugares señalizados para este efecto. Pequeños refrigerios están permitidos, respetando la Ética del Bosque.
Por seguridad y resguardo, respetar la señalización en senderos y caminos. Ingresar solamente a sectores autorizados. Antes de visitar un lugar, por favor consulta al personal de los centros de visitantes de la Reserva.
Por seguridad de los visitantes, y para mantener el ritmo natural de la vida silvestre, la velocidad máxima de circulación dentro de la Reserva es de 30 km/hr. Se permite circular solo con vehículos en buen estado y aptos para los caminos y condiciones climáticas. Se prohíbe el ingreso de motos a combustión, pues su sonido perjudica la fauna silvestre.
Un recorrido seguro comienza con la adecuada información y obtención de mapas de ruta, señalando caminos, senderos, destinos y características del lugar a visitar. Se debe contar con un buen equipo para la intemperie, zapatos apropiados y resguardo para el sol, lluvia y nieve.
El bosque y sus habitantes te lo agradecerán de mil maneras.