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Javi Epple
Viajar en marzo a Huilo Huilo es elegir disfrutar de un espacio de naturaleza con la calma del otoño y el clima del verano. Es tener más posibilidades de encontrarse con aves en los senderos. También aprovechar de hacer harto deporte, maravillarse con la arquitectura, acercarse a la conservación y dejar que la mente flote en baños de bosque .
Huilo significa coligüe, Huilo Huilo: lugar de muchos coligües. Empezó como un sueño, como una idea loca que ha ido tomando fuerza hasta desembocar en lo que hoy conocemos como un proyecto maravilloso, el que se levanta sobre tres verdades irreductibles: conservación, inclusión de la comunidad y desarrollo del turismo sustentable.
Hay muchas alternativas, entre ellas: cabalgatas, trekking, rafting, paseo a termas, navegación y kayak. Tenemos también uno de los canopy más largos de Sudamérica, circuitos de mountain bike, rutas de enduro, rutas educativas, hay puentes colgantes, miradores, hadas, duendes, esculturas. ¡Huilo Huilo es mágico!
La Reserva Biológica se levanta en la región de los Ríos, cerquita de la cordillera de los Andes, a los pies de un Mocho-Choshuenco de nieves eternas, a la calma del lago Pirehueico, maravilloso. Es y está entre Neltume, pueblo histórico cuyo nombre significa «ir a la libertad», y Puerto Fuy una localidad de playa, el principio del puente invisible que nos conecta con la Argentina.
Viaja en marzo a Huilo Huilo y permítete descubrir un poco de lo que somos, de lo que hacemos, de lo que sopla el viento de nuestros sueños y nuestras alas verde bosque.
Verás que hay mucho amor en ese proyecto, que está lejos de ser perfecto, pero que avanza con un sentido de integración, de conjunto. Lo hacemos por la conservación y con la idea de hidratar la capacidad de asombro de los viajeros, de ser un puente donde dejarse cautivar, para re-conectar con la tierra y su energía maravillosa.
La naturaleza siempre encuentra caminos y nosotros somos parte de ella.
